Si bien algunas aseguradoras puede ofrecer alguna ventaja extra para complementar una cobertura de seguro de Responsabilidad Civil, en esta oportunidad le daremos a contaremos de qué tratan las coberturas clásicas que no pueden faltar al contratar un seguro de este estilo:
– Responsabilidad Civil Profesional: cubrirá directamente al profesional ante omisiones o errores que provoquen algún daño a la construcción durante su realización y por 10 años una vez finalizada.
– Retroactividad ilimitada: cubrirá a terceros una vez finalizada la obra por el tiempo máximo que la ley permita, lo cual será de amparo ante cualquier tipo de reclamación o accidente que ocurra con la obra finalizada.
– Responsabilidad Civil General y Patronal: cubrirá reclamos realizados tanto por los empleados que trabajen para la construcción como también de terceros, ante la situación de haber sufrido algún daño a nivel personal.
– Responsabilidad Civil de los Subcontratistas y Subsidiaria: donde el asegurado deberá responder ante el accionar de una subcontratado ante la situación de que éste último genere algún daño encomendado por el asegurado.
– Reclamación de daños y gastos de defensa, reembolsando el dinero en caso del asegurado deba hacerse cargo de gastos por daños. Al igual que la pérdida de documentación y daños a expedientes.
– Inhabilitación Profesional: en caso de encontrarse imposibilitado de realizar alguna actividad profesional se le dará una indemnización de forma mensual.
– Se mantendrá en vigencia en el territorio español y en el país donde se mantenga alguna actividad profesional.
También se elegirán límites de cobertura ante siniestros, franquicias, entre otros detalles que incluye cada póliza